Existen varias cirugías plásticas, hay unas que son quirúrgicas y otras que no. Las cirugías plásticas quirúrgicas son: aumento mamario, abdomen- tummy tuck, liposucción, lifting facial, rinoplastia, rejuvenecimiento vaginal, blefaroplastia y la otoplastia. Las que no son consideradas quirúrgicas son: lifting (hilos tensores) y peeling químico. También existen procesos estéticos que no involucran cirugía y con solamente una inyección se puede transformar una parte del cuerpo. Por ejemplo, el botox, la mesoterapia y sustancias de relleno.
No estoy en contra que la gente se haga cirugía plástica, el problema se encuentra cuando las personas comienzan a hacérselas una y otra vez, no tomando en cuenta el riesgo en el que se ponen. Se han oído de varios casos que personas mueren o se enferman gravemente en el proceso de una liposucción. Cuando una persona se hace un proceso estético para mejorar una parte del cuerpo con la que le surgen complejos, es algo bueno ya que después de la cirugía va a poder ser una persona con una autoestima más alta.
En estos tiempos ya nadie se conforma con lo que tiene, ni siquiera con sus propios cuerpos. Han sido inventadas todo tipo de cirugías para que las personas se vean “mejor”, aunque en muchos casos la gente termina arruinándose sus cuerpos. En muchos casos se ve que las personas que se someten a la cirugía plástica, después quieren arreglarse más y más partes de sus cuerpos. Esto se puede llegar a convertir en una obsesión o adicción. Sin embargo, la cirugía plástica no es algo malo puede ayudar a reconstruir partes corporales que pueden ser dañadas en accidentes. El problema se encuentra cuando la gente se arregla una cosa y luego quiere arreglarse todo el cuerpo.
Nicole Suger
Fotografía tomada de: http://www.fotolia.com/id/1556482
